Las fiestas de San Fermín han terminado ya, la vida vuelve a la normalidad en Pamplona y su comarca y los extrajeros han desaparecido... ¿todos ellos? ¡No! Todavía quedan pequeños grupúsculos, que o bien han decidido quedarse un tiempo más o lo tenían planeado desde un principio.
Hablan en inglés, deambulan por los parques o hacen pequeños recados, envían recuerdos por correo o compran el pan. Ingleses, australianos, franceses, continúan entre nosotros, seguramente con la sana intención de descubrir Pamplona en un estado natural y sin ruido.
O puede que se quedaran dormidos cuando partía su tren o autobús.
El avión seguro que no, ¡que vaya precios!
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ResponderEliminarBueno, eso depende, los australianos se atreven con lo que sea.
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